Múltiples datos científicos obtenidos en innumerables investigaciones y estudios han evidenciado que, en esta etapa de la vida del ser humano, se sientan las bases y los fundamentos esenciales para todo el posterior desarrollo del individuo; así como la existencia de grandes posibilidades que en ella se dan, para la formación y construcción de las más diversas capacidades y cualidades personales.
Constituyendo un período con tan amplias posibilidades, resulta de gran interés conocerlo en toda su profundidad, para sobre la base de este conocimiento científicamente fundamentado, poder organizar y estructurar las fuerzas educativas, y dirigirlas a lograr el máximo desarrollo posible en cada niño y niña.
Lo anterior establece la necesidad de conocer las particularidades de tan importante momento del desarrollo infantil, y de preparar y capacitar a las personas, familias y profesionales encargados de su educación.
En el nuevo milenio parece muy claro que el concepto educación hay que entenderlo como la potenciación de las predisposiciones que la naturaleza depara a los niños, lo cual parece estar muy claro que ha de ser así, cuando en realidad la mayoría de las situaciones y consideraciones del futuro están aún por conocer. Ello determina que el enfoque actual ha de estar encaminado a que los pequeños aprendan a aprender, comprender y emprender.
Es preciso hacer hincapié en la importancia de lo que significa para el desarrollo el estímulo temprano de las potencialidades de los infantes. No hay que olvidar que esta etapa de la vida es fundamental, hasta el punto de marcar su evolución para el futuro. Son años cruciales, de los que dependerá el posterior desarrollo y desenvolvimiento de la persona a lo largo de su vida.
Esto implica la necesidad imperiosa de establecer las dimensiones educativas que han de permitir el alcance de tales logros en función de las características y necesidades del niño y la niña en esta etapa de la vida y, una vez establecidas las dimensiones educativas, concretar los objetivos que deben trabajarse en cada momento con estos en las diferentes fases evolutivas de su desarrollo.
Pero las dimensiones educativas solo pueden estructurarse a partir de un conocimiento cabal de las particularidades y condiciones de los procesos evolutivos que forman parte integral del desarrollo, en los cuales los diferentes procesos psíquicos y anatomo fisiológicos funcionan como una unidad integrada, y donde solamente con fines didácticos se analizan por separado, pues en la realidad del ser humano estos diferentes procesos se imbrican e interrelacionan, dando lugar a una configuración única e irrepetible como es la personalidad, que en esta etapa comienza a desarrollarse.
Este curso se cuestiona como objetivo fundamental reflexionar sobre como y en que momento se producen procesos evolutivos del desarrollo psíquico en la primera infancia