5.1. DÍA A DÍA

5.2. LOS CUIDADOS GENERALES DE LA MUJER EMBARAZADA

5.1. DÍA A DÍA

En la mayoría de embarazos la futura mamá puede seguir con su ritmo de vida habitual. No obstante, es fácil que la cotidianidad se vea afectada por la gestación y necesite adaptar sus costumbres a la nueva situación.

EL SUEÑO

Lo normal es que aumente el deseo de dormir durante los primeros meses debido a los cambios hormonales que sufre el organismo. La futura madre puede beneficiarse del mayor número de horas de sueño nocturno y buscar algunos momentos para reposar durante el día.

También puede ocurrir que, debido a la inseguridad, la madre sienta temores y ansiedad por el futuro inmediato y le cueste conciliar el sueño por las noches. En estos casos el insomnio desaparece cuando la madre se prepara psicológicamente hablando con el médico o con su pareja, aunque una charla familiar con su madre puede ser la mejor ayuda para una mujer embarazada.

Durante el segundo trimestre el embarazo tiende a ser sereno y reconfortante. La madre puede dormir en cualquier posición, las molestias de los primeros meses han desaparecido y la ansiedad se ha controlado en la mayoría de los casos.

A partir del sexto mes poco a poco aparecen dificultades. El bebé tiene sus propios ritmos de sueño y vigilia y es habitual que se mueva por las noches despertando a la madre. La aparición de calambres en las piernas o los pies también puede interrumpir el sueño, estos calambres pueden deberse a alguna carencia de vitaminas y, aunque desaparezcan con un ligero masaje, es aconsejable consultar con el médico.

Cuando el volumen del bebé aumenta, la madre tiene dificultades para encontrar una postura confortable. Lo mejor que puede hacer es acostarse sobre el lado izquierdo para evitar la presión sobre la vena cava y colocar un cojín en la rodilla derecha.

Otro factor que favorece el insomnio son los sueños agitados y las pesadillas casi siempre provocados por las dudas y los miedos que le asaltan a la madre cuando se aproxima la fecha del parto.

LA ALIMENTACIÓN

El organismo de la madre se encarga de proporcionar al bebé todo lo que necesita durante el tiempo de gestación, pero eso no significa que la futura madre deba comer por dos, lo que debe hacer es alimentarse mejor.

El médico, a lo largo de las diferentes consultas, va aconsejando sobre las necesidades de alimentación de la madre en función de su peso al inicio del embarazo, del gasto energético diario, de las costumbres alimenticias y de sus antecedentes hereditarios.

En general la dieta debe ser equilibrada, comer de todo y no abusar de ciertos alimentos.

Las proteínas y los hidratos de carbono son necesarias para el desarrollo general del bebé y en especial el del cerebro.

Los glúcidos (grasas) son imprescindibles para la formación del sistema nervioso del feto.

El calcio se necesita para la formación de los huesos y los dientes y precisa de la vitamina D como factor de absorción.

Las vitaminas y sustancias minerales, sobre todo el hierro en los últimos meses de embarazo.

Los líquidos, sobre todo el agua, facilitan los intercambios a través de la placenta. Otros líquidos como los zumos naturales de frutas y verduras, leche e infusiones son recomendables pero cualquier bebida con alcohol está desaconsejada durante todo el embarazo y prohibida en los primeros meses.

EL TRABAJO

El trabajo no supone un factor de riesgo para el embarazo siempre que no se realice en condiciones difíciles o suponga un peligro como manipular sustancias químicas, trabajar en radiología, provocar un estrés fuerte, etc.

En general desarrollar una profesión que gusta estando en contacto con el ambiente laboral es positivo para la futura madre. Debe tomar una serie de precauciones como no estar de pie más de 2 ó 3 horas seguidas, no coger pesos excesivos habitualmente ni permanecer en un ambiente demasiado frío, seco o húmedo. El nivel de ruido elevado, las vibraciones de máquinas industriales, las malas posturas o el cansancio son factores negativos para la gestación.

EL DEPORTE

Como cualquier actividad física regular es beneficioso para la mujer embarazada, mantiene el tono cardíaco y la capacidad respiratoria entre otros aspectos positivos. Posiblemente en el último trimestre la actividad física deba suspenderse porque el volumen del útero limita los movimientos del diafragma y los músculos abdominales no cumplen bien su misión de sostener la columna vertebral y la caja torácica porque están distendidos.

Las actividades más recomendadas son caminar, nadar o hacer gimnasia suave con regularidad.

Los deportes contraindicados, sobre todo después del primer trimestre, son el esquí de fondo, el tenis, la equitación, la bicicleta de montaña, el piragüismo, el salto de trampolín, el submarinismo, el esquí acuático o el windsurf.

LOS VIAJES

Viajar, aunque sean largas distancias, no está contraindicado hasta el 7º u 8º mes donde hay más posibilidades de parto prematuro. El problema de los viajes largos es el cansancio o la incomodidad, por eso la futura madre debe garantizarse el descanso regular y la moderación en las actividades que vaya a realizar durante el viaje. En todos los casos es aconsejable consultar con el médico o la comadrona.

CUESTIONARIO DE VERIFICACIÓN

SECCIÓN 1 - BLOQUE 5 CAPÍTULO 1 FECHA:

1. Durante los primeros meses de embarazo aumenta el deseo de dormir de la futura madre.

2. En el segundo trimestre la madre duerme mal porque le cuesta encontrar una postura cómoda.

3. En el último trimestre es recomendable que la madre se acueste sobre el lado izquierdo.
4. La dieta de alimentación debe ser equilibrada, comer de todo y no abusar de algunos alimentos.
5. Las proteínas son necesarias sobre todo para el desarrollo del cerebro del bebé.
6. No es recomendable que la futura madre tome mucho líquido para evitar que se hinchen las piernas.
7. El trabajo suele ser un factor de riesgo para el embarazo.
8. La mujer embarazada debe evitar el ruido elevado, las vibraciones de las máquinas industriales, las malas posturas y el estrés.
9. Durante los dos primeros trimestres la actividad física regular es beneficiosa para la mujer embarazada.
10. Es recomendable caminar, nadar o hacer gimnasia suave.
11. También es beneficioso practicar tenis y bicicleta de montaña.
12. La mujer embarazada no debe realizar viajes largos.

5.2. LOS CUIDADOS GENERALES DE LA MUJER EMBARAZADA

La piel es más fina, transparente y seca durante el embarazo por el efecto de las hormonas. También por este motivo en el rostro de algunas mujeres aparece una pigmentación de manchas oscuras casi simétricas que se denominan “máscara del embarazo”, suele desaparecer lentamente después del parto. Los cuidados generales para la cara que se recomiendan es evitar la exposición al sol sin una crema protectora de índice elevado o los productos que contengan alcohol y utilizar una crema hidratante.

Alrededor del 6º mes de gestación pueden aparecer unos puntos rojos pequeños en la zona alta del cuerpo (cuello, pecho y brazos), son “angiomas estelares” que no tienen importancia y desaparecen después del parto.

La futura madre corre el riesgo de que surjan estrías cuando la piel pierde elasticidad. Las estrías son marcas rojizas en forma de rayas que progresivamente se vuelven blancas. Aparecen en el vientre, las nalgas, los muslos y los pechos y se deben a la rotura de las fibras elásticas de la dermis. El aumento de peso favorece las estrías y también la juventud de las futuras madres. Es recomendable un masaje diario con una crema antiestrías a base de elastina o con aceite de almendras desde el principio de la gestación.

Los pechos, junto con el vientre, es la parte del cuerpo que sufre una mayor variación. Desde el principio del embarazo los pechos se hinchan y su peso puede distender su frágil piel, por eso es importante sostenerlos con un sujetador adaptado, de copas profundas y tirantes anchos.

Los estrógenos mejoran notablemente el cabello seco e incluso frena la caída normal, sin embargo las mujeres con cabello graso verán incrementarse el problema teniendo que aumentar la frecuencia de su lavado. Los dermatólogos recomiendan utilizar un champú suave y evitar las decoloraciones y las permanentes para prevenir reacciones alérgicas, pudiendo usar tintes vegetales sin problemas.

La mujer embarazada debe aprender a moverse correctamente porque la espalda y las piernas mantienen un peso adicional. En la postura de pie o sentada debe mantenerse recta, sin que moleste el vientre, basculando la pelvis hacia delante pero sin arquear los riñones ni contraer los músculos abdominales. La gimnasia suave le ayudará a aumentar la flexibilidad y el control del propio cuerpo a medida que éste va modificándose.

Es muy importante que la futura madre se encuentre guapa y atractiva, pero no a costa del perjuicio de su cuerpo. En este período la ropa debe ser cómoda, que no apriete. El calzado, además de cómodo, no debe superar los 3 centímetros de altura; es posible que necesite uno o dos números más del que ha usado hasta este momento porque los pies y las piernas suelen inflamarse, también por este motivo no debe usar botas altas que comprimen la pantorrilla. Es posible que tropiece a menudo, esto se debe a que se ha desplazado el centro de gravedad y las articulaciones ahora son más débiles, por este motivo hay que cuidar el calzado y andar con más cuidado para prevenir posibles tropezones y caídas.

CUESTIONARIO DE VERIFICACIÓN

SECCIÓN 1 - BLOQUE 5 CAPÍTULO 2 FECHA:

1. La futura madre no debe exponerse al sol sin crema protectora.

2. La aparición de estrías es inevitable, la mujer debe resignarse.

3. Es preciso utilizar un sujetador adaptado con tirantes anchos para proteger la piel de los pechos.
4. Durante el embarazo es positivo hacerse decoloraciones y permanentes en el pelo porque la madre se encuentra más atractiva.
5. La mujer embarazada debe aprender a moverse correctamente para no perjudicar las piernas y la espalda.

6. Cuando esté de pie la gestante debe estar recta, basculando la pelvis hacia delante, sin arquear los riñones ni contraer los músculos abdominales.
7. La ropa debe ser cómoda y conviene usar botas que sujeten las pantorrillas.